Por Alfredo Fernández Silva/ (Presidente del PD-30-11-FP)
La Habana, 27 de Mayo del 2013. Eugenio Eduardo Sierra Ortega, reo opositor que milita en el Partido Democrático 30 de Noviembre Frank País, está siendo víctima de tratos crueles e inhumanos por parte de sus carcelarios, quienes han llegado al punto de robarle sus pertenencias, como represalia a su actitud contestataria.
El reo, que es hijo de la activista de derechos humanos, Niurka Caridad Ortega Cruz, denunció este 24 de mayo las arbitrariedades que cometen las autoridades carcelarias contra él, debido a su postura política y por ser hijo de una activista de derechos humanos, pues así se lo han hecho saber los militares.
En menos de 15 días, Sierra Ortega, ha pasado por tres prisiones distintas, ha sufrido golpizas de manos de los militares, ha tenido que vivir en celdas de castigo en reiteradas ocasiones, y en estos momentos tiene que dormir en el suelo, debido al estado de hacinamiento que se vive en la prisión Quivicán.
“Cuando llegué a la 15-80, trasladado desde Valle Grande, me dieron tremenda golpiza y me llevaron para la celda de castigo donde permanecí por cuatro días”, dijo el reo este 24 de mayo, al llegar a la prisión Quivicán, en el municipio del mismo nombre, de la provincia Mayabeque.
Según describió, al pasar el recuento matutino el día 23, en la 15-80, un guardia se le abalanzó encima sorpresivamente y lo esposó usando la violencia.
“Sin yo esperarlo, un guardia me abracó y me puso las esposas, y luego me dijo que me iba de traslado. Un preso y otro guardia tuvieron que recogerme las pertenencias, yo revisé las cosas y todo estaba completo; pero al llegar aquí a Quivicán, me faltaban los zapatos. Yo estoy seguro que me los robó un guardia llamado Bicet”, aseguró Sierra.
Al llegar a Quivicán, un militar le manifestó al reo que no se acomodara mucho, pues pronto sería trasladado para otra prisión y le manifestó, “que eso se lo hacían para que su mamá tuviera que estar corriendo de una prisión para otra, por ser una contrarrevolucionaria”.
Sierra aseguró, que al menos diez presos duermen en el suelo en cada una de las 18 compañías con que cuenta la prisión Quivicán, a más de 40 kilómetros de La Habana donde reside su Mama Niurka Caridad Ortega Cruz